viernes, 31 de julio de 2009

Salí como Bowie

Sin fotoshop, sin trucos, misterios de la fotografía digital, salí con un ojo de cada color, como Bowie. En teoría a él le quedaron así porque de chico le pegaron una piña en un ojo, a mi que yo sepa no, me miro al espejo y los tengo marrones/amarillos.
No voy a emitir comentarios sobre el lugar donde está sacada la foto, la subí simplemente por los ojos, lo único que aclaro es que no me estaba limpiando el culo, ni la cola, ni meditando, ni desparasitando. Realmente no tengo porqué contarles sobre donde me gusta estar y sobre donde no. Chau.

Mi osito preferido II (lo que queda de él)


El tiempo siguió pasando, dejó sus marcas, con las mordidas hechas, con el deterioro; como mide uno el tiempo?
Hace mucho que no lo veo, quizás me lo tiraron a la basura, quizás lo escondí y no me acuerdo donde. Lo extraño.
Por el momento, no lo puedo morder, morder y morder